Para la diputada Nibia Reisch (Partido Colorado) “comenzar el nuevo año con un mes de enero en el que hubo 34 homicidios, 21 de ellos cometidos durante la primera quincena, habla no sólo de un número que parece irracional, sino de una propensión desenfrenada a la que el Gobierno se ve impotente para solucionar. Más asesinatos que días en el mes es una terrible señal”
“El año 2018 vio la luz con crímenes, tiroteos en la vía pública y asaltos cinematográficos en distintos puntos del territorio nacional, y esos no son escenarios que queremos en nuestro país, porque no estamos acostumbrados a ellos y porque los uruguayos de bien valoramos por encima de todo el respeto a la vida y a la propiedad”, indicó.
“Llama la atención que, por ejemplo en Montevideo, el Programa de Alta Dedicación Operacional (PADO) funciona las 24 horas en el barrio Casavalle, y sin embargo ha sido allí donde se han cometido más asesinatos, lo que está advirtiendo que hay algo que no se está haciendo bien. Van 41 homicidios en apenas 36 días de 2018”, expresó la legisladora.
“Pero además de los homicidios, los medios de prensa están informando casi diariamente del robo a locales de cobranza o remesas y la voladura de cajeros, en episodios que asombran y preocupan, ya que es inconcebible la desenvoltura con la que los delincuentes acceden a grandes cifras de dinero”, manifestó. Desde fines de setiembre hasta la fecha ha habido 24 voladuras a cajeros automáticos, con especial incremento en diciembre, enero y febrero, algunos consumados y otros intentos fallidos”, recordó.
“A ello debe agregarse el robo promedio de 41 vehículos por día (15.000 al año), lo que completa una visión bastante aproximada del actual panorama de inseguridad”, continuó.
“Hablamos del atraco al Casino del Montevideo Shopping, un episodio que parece inaudito por estar emplazado dicho edificio en una de las áreas de la capital del país no sólo más vigiladas y patrulladas, sino además de las más observadas ya que en sus cercanías existen varias embajadas y bancos, sin olvidar que allí con anterioridad han aparecido artefactos explosivos, falsos por suerte, lo que debería haber movido a tener mayor cuidado aún. No es fácil justificar cómo, con suma facilidad y rapidez, e incluso sin forzar las barreras para ingreso y egreso de vehículos, desconocidos llegaron, rapiñaron y huyeron con un botín de más de $ 5:000.000. Es difícil entender que hayan fallado todos los recursos, humanos y tecnológicos, al momento de impedir o al menos de minimizar los efectos del asalto”, dijo Reisch.
“En los últimos tiempos han sido muchísimos los actos delictivos cometidos en diversos puntos del país. Observemos la situación en el departamento de Colonia. Hay frecuentes episodios de motochorros en Carmelo, en Juan Lacaze hubo un incremento notorio en cantidad y virulencia de hechos que por suerte se redujeron con la implementación del PADO, pero esos delincuentes, presumiblemente llegados desde Montevideo y la zona metropolitana, ahora se han trasladado para otros lugares, donde ha habido varios robos de vehículos y donde en las últimas horas tuvo lugar un asalto a mano armada por parte de encapuchados a la sucursal de un supermercado y de una red de cobranzas en Rosario. En Colonia Valdense ha habido múltiples robos y se llevaron hasta la caja fuerte del Municipio, y en Nueva Helvecia también ha habido varios hechos, incluido un asalto a mano armada a un supermercado hace un par de meses”, recordó Reisch.
“Nótense los objetivos elegidos en todo el país, que yo diría que son casi simbólicos: bancos, joyerías, redes de cobranza, supermercados. Y sin embargo, ¿cuántos de esos casos fueron esclarecidos? ¿Cuántos protagonistas de esos hechos delictivos fueron detenidos y cuántos hay procesados? ¿Cuánto dinero fue recuperado? ¿Qué pasa con el patrullaje? ¿Qué beneficio proveen las cámaras de videovigilancia? Son todas interrogantes que todos nos hacemos y que las autoridades del Ministerio del Interior no responden”, señaló.
Y no responden porque el Ministerio del Interior se equivoca, fracasa, falla. Porque administra mal los recursos humanos y económicos, porque gestiona mal, porque diseña estrategias equivocadas, porque varias disposiciones del nuevo Código del Proceso Penal (CPP) en nada colaboran y, antes bien, por el contrario, perjudican la labor policial”, opinó.
“En el Uruguay de hoy delinquir parece ser un buen negocio, ya que la impunidad parece reinar sobre todo y es un incentivo poderoso para quienes optan por violentar el derecho a la propiedad y a la vida. Y esto es muy grave. Que quienes delinquen ya no teman a robar ni a matar porque las autoridades no esclarecen los casos, es una mala señal”, dijo la parlamentaria.
“Hay algo que es bien claro: el rotundo fracaso del ministro Eduardo Bonomi y del subsecretario Jorge Vázquez. La realidad lo demuestra: cinco veces más presupuesto, 5.000 efectivos más, récord de homicidios y aumento considerable de hurtos y rapiñas. Hay un notorio incremento de la inseguridad, que no se soluciona con juegos de palabras, explicaciones y justificaciones, sino cambiando la política y la gestión en lo material. Y si en 7 años no lo hicieron, llegó el momento de cambiar a los responsables. El presidente de la República debería remover de sus cargos a su hermano y a Bonomi”, finalizó Reisch.