Desde 2005, las transferencias económicas del Ejecutivo a los gobiernos subnacionales crecieron 125 % en términos constantes, mientras que el Fondo de Incentivo a la Gestión Municipal se multiplicó por diez, destacó el subdirector de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Santiago Soto. Ese acuerdo político dispone de un amplio consenso democrático, porque es refrendado por todos los partidos en el Parlamento, añadió.
Soto encabezó la apertura del seminario Sistemas de Transferencias y el Rol de los Gobiernos Departamentales en la Equidad y el Desarrollo Territorial, junto al representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en Uruguay, Morgan Doyle.
En ese marco, señaló que el Gobierno central destina un punto del producto bruto uruguayo a las transferencias monetarias dirigidas a intendencias y municipios que, desde 2005, crecieron un 125 % en términos reales. En el caso del Fondo de Incentivo a la Gestión Municipal, el incremento presupuestal se multiplicó por diez en el mismo período.
Soto calificó de históricas esas cifras y consideró que se trata “del acuerdo político más republicano y con más amplia base que existe en nuestro país”, ya que el consenso alcanzado entre el Poder Ejecutivo y el Congreso de Intendentes es plasmado en las leyes de presupuesto y rendiciones de cuentas que, luego, son aprobadas con el voto de todos los partidos políticos.
“En Uruguay, pocas cosas han tenido niveles de diálogo, acuerdo, confianza y construcción (…) Es una de las cosas que nos tiene que llenar de orgullo en momentos en que tanto se habla de república y democracia en otros países de América y el mundo”, reflexionó.
Finalmente, destacó el proyecto enviado por el Ejecutivo al Parlamento para reformular la ley descentralización y participación ciudadana que, de aprobarse, permitirá la creación de nuevos municipios, equilibrará las competencias con las intendencias y redefinirá el rol de los concejos y la integración de las juntas departamentales.