La forma de recaudación del Impuesto de Primaria y el destino que se la da a lo recolectado ha sido una preocupación permanente de la diputada Nibia Reisch (Partido Colorado – Talvi – Lista 600), que volvió a insistir con el tema frente al gobierno.
La legisladora recuerda que “tradicionalmente la ANEP destinó la recaudación del Impuesto de Primaria (creado por el Art. 636 de la Ley Nº 15.809 de 8 de abril de 1986) al pago de alimentación, transporte de niños/as con discapacidades y vigilancia de los centros de estudios”.
Este impuesto, cuya acción corresponde al Poder Ejecutivo, sufrió diversas modificaciones y ampliaciones y -a partir del 1º de enero de 2018- pasó a ser recaudado, administrado y fiscalizado por la DGI.
Reisch enfatiza que “actualmente muchas son muchas las deficiencias que aquejan a las escuelas del país, y en especial a las rurales, en el área de alimentación, traslado y vigilancia. Estas necesidades, la mayoría de las veces, son cubiertas por diversas acciones emprendidas por los padres de los chicos que allí concurren (los que incluso cocinan y limpian en los locales escolares) y por la solidaridad (donaciones) de los vecinos y fuerzas vivas de la zona en la que el centro educativo se asienta”.
“Las comisiones de fomento trabajan arduamente para hacerse cargo de costos que deberían ser asumidos por el Estado, en forma permanente hacen beneficios, venta de rifas, cenas benéficas, para recaudar fondos”, subraya.
Por lo expuesto, la parlamentaria solicita información respecto al total recaudado por concepto del impuesto mencionado en los últimos 5 años a nivel nacional, por departamento y por tipo de inmueble. Asimismo solicita conocer el destino dado a lo recaudado en igual período, también por departamento y tipo de gasto e inversión.
Cabe recordar que en agosto de 2017, la diputada Reisch solicitó la disminución del Impuesto de Primaria para las localidades de Colonia, Carmelo, Tarariras y Nueva Helvecia, ya que un reaforo realizado en 2001 por la Intendencia de Colonia con el apoyo de un préstamo del BID a unos 16.000 inmuebles en estas cuatro ciudades, determinó para ellos un brutal incremento en los valores de aforo preexistentes, ya que dejó de tomarse como base de cálculo el valor histórico, tomándose el (nuevo) valor BID.
Ello perjudicó los pobladores de esas cuatro ciudades y generó una situación de injusticia tributaria, ya que ellas pagan con un criterio diverso al del resto del departamento de Colonia, lo que implica que en algunos casos el Impuesto de Primaria supere hoy día incluso al de la propia Contribución Inmobiliaria.
