De acuerdo a un informe del Instituto Cuesta Duarte, el pasado 23 de marzo el Banco Central publicó el dato oficial del producto bruto interno (PBI) correspondiente al último trimestre del año pasado, lo que permitió además, contar con la información de cierre de 2022.
El informe marca que «en el último trimestre del año pasado, el PBI disminuyó (se produjo un menor valor total de bienes y servicios en el país en ese período) tanto en la comparación con el trimestre anterior como respecto a igual período de 2021. Se trata de la segunda caída consecutiva del PBI trimestral, por lo que técnicamente la economía ingresó en recesión. Si bien era esperable una nueva contracción del PBI como consecuencia del impacto negativo de la sequía en la última parte del año pasado, sorprendió la magnitud de la misma, que hizo que la producción fuera menor incluso a la registrada un año antes.»
Se evalúa que «con todo, la economía creció 4,9% en el año 2022, muy en línea con las estimaciones recientemente realizadas por las autoridades de gobierno. Se trata de una tasa de crecimiento significativa para nuestro país, ya que duplica prácticamente la media histórica de expansión y se ubica por encima del crecimiento potencial estimado para el país.»
Desde al Instituto se explica que «a pesar de esta mayor generación de riqueza a nivel agregado, varios indicadores se encuentran rezagados en cuanto a la recuperación y todavía no alcanzaron los registros prepandemia. Entre ellos destacan: el poder de compra promedio del salario y los niveles de pobreza, datos que referencian al bienestar económico de los hogares. También la distribución de los ingresos empeoró al compararla con 2019, tanto si se la mira desde el lado de los ingresos personales (donde el índice de Gini muestra una tendencia al alza desde 2019) como a partir del análisis del reparto entre quienes participan de la producción. En este sentido, la masa salarial disminuyó entre 2019 y 2022, no solo en cuanto a su peso en la producción total sino en relación a sí misma en términos reales, a pesar del crecimiento registrado en el empleo.»