El novel ministro de Defensa Nacional, Armando Castaingdebat, aseguró que su antecesor, Javier García, dejó “la vara muy alta” en la conducción de la cartera. “Queremos poner nuestra impronta en la familia militar, que necesita del acompañamiento del Estado”, declaró, en alusión a uno de los ejes de su gestión.
García transmitió, este lunes 4, el mando al frente del Ministerio de Defensa Nacional a su sucesor, Armando Castaingdebat. Al acto, que se desarrolló en la sede de ese servicio, asistieron el secretario y la prosecretaria de la Presidencia de la República, Rodrigo Ferrés y Mariana Cabrera, respectivamente; los ministros del Interior, Nicolás Martinelli; Transporte y Obras Públicas, José Luis Falero; Industria, Energía y Minería, Elisa Facio; Relaciones Exteriores, Omar Paganini, y Turismo, Tabaré Viera, así como el subsecretario de Defensa Nacional, Rivera Elgue, y los comandantes en jefe de las tres fuerzas.
Castaingdebat agradeció la confianza depositada por el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, en su designación y aclaró que el reemplazo no obedece a “un cambio de rumbo”, sino que, para el mandatario, quienes se encuentren “en la primera línea” en las próximas elecciones nacionales deben dedicarse a ello de forma exclusiva. Asimismo, reconoció que García dejó “la vara muy alta” en la conducción del ministerio.
