En una declaración dada a conocer en el día de hoy, Unidad Popular manifestó lo siguiente:
«Luego de varias reuniones de la Intersocial, el 2 de diciembre no se logró el consenso, y las organizaciones integrantes de la mesa, PIT-CNT, FUCVAM, FEUU e Intersocial Feminista, resolvieron convocar al Referéndum contra la LUC, incluyendo los 133 artículos que habían acordado presentar a las organizaciones sociales en dicha instancia.
La Unidad Popular desde su declaración del 7 de marzo en adelante ha militado intensamente contra la LUC, tanto mientras se dio el debate parlamentario como a posteriori donde surge la necesidad de implementar el recurso del Referéndum. Porque entendemos que esta ley es parte fundamental del programa de gobierno claramente de derecha, que busca con el mismo avanzar sobre un conjunto muy amplio de temas que afectan directamente los intereses populares, como ser sus recursos económicos, la educación pública, la seguridad, entre otros.
Hemos participado de reuniones con los delegados del PIT-CNT y FUCVAM y trabajado seriamente en una propuesta de inclusión de 230 artículos, los que consideramos los más graves, los más retrógrados, propuesta con un contenido muy importante y que abría a la vez un camino de amplia unidad de acción dadas las diferencias que se expresaban.
Esa propuesta no prosperó al igual que otras que surgieron en la propia Intersocial que iban en el mismo sentido, porque en las organizaciones integrantes de la mesa primó limitarse en los hechos a la exigencia de la dirección del Frente Amplio, de no incluir los artículos de la LUC que votó dicha fuerza en el Parlamento.
Nuestra participación y amplitud en el referéndum siempre estuvo sujeta a aquellos contenidos que entendemos irrenunciables. Lamentablemente la propuesta presentada por la mesa de la intersocial en acuerdo con el Frente Amplio, deja afuera un conjunto de artículos trascendentales para los intereses populares, como lo son muchos artículos que recrudecen la política represiva, los que atentan contra la educación pública, los que utilizan los recursos estatales para financiar las obras de UPM2 (uso del 30% de las ganancias del BROU y el Fondo de Estabilización energética de UTE), los que profundizan las privatizaciones mediante mecanismo de PPP, los que modifican la URSEA y URSEC, los que avanzan contra la Seguridad Social, los que modifican el régimen de adopciones y los que habilitan a la precarización de la vivienda, entre otros.
La posición final adoptada que no tuvo en cuenta la opinión de decenas de organizaciones sociales ni la nuestra, va a perjudicar la participación y el entusiasmo imprescindible de muchos militantes y organizaciones populares en una batalla política con las exigencias que tiene este Referéndum.
Es por ello que la Unidad Popular ha resuelto:
1) No integrar la comisión pro referéndum que impulsa los 133 artículos.
2) Habilitar a nuestra militancia a emprender las actividades que entiendan pertinentes en el ámbito social para el apoyo a la recolección de firmas.
3) Impulsar acciones coordinadas para dar la batalla contra la reforma neoliberal de la seguridad social.
4) Trabajar fuertemente para lograr estos objetivos, con la mayor independencia y unidos firmemente a nuestro pueblo.»