Se trata de un proyecto presentado a la Comisión Especial de Seguridad Social del Senado por Nicolás Botana y Diego Gordillo.
Busca reconocer a los familiares y entornos cercanos de las personas con discapacidad severa, otorgándoles el Derecho a obtener la pensión a la vejez a la edad de 65 años y no a los 70 como establece la normativa vigente.
La propuesta fue recibida y aprobada por la comisión, que la agregó al artículo 200 del texto de la reforma.